Creció en un punto la tasa de migración internacional en último trimestre: Inegi

• La edad del grupo movilizado se incrementó de 24.8 a 27.7 entre 2006 y 2009, informa

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía Inegi presentó las tasas de migración internacional al segundo trimestre de 2010, obtenidas a través de la información del cuestionario sociodemográfico de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), de donde se desprende que al segundo trimestre de 2010, por cada mil residentes habituales en nuestro país se contabilizaron 4.6 salidas por cambio de residencia al extranjero. No obstante que la tasa más reciente de emigración internacional (4.6 por ciento) se incrementó casi en un punto respecto de la registrada al primer trimestre del año (3.7 por ciento), esta nueva observación no altera la tendencia decreciente que se aprecia en la serie completa, ya que el número de emigrantes reportado es menor que el observado durante todos los trimestres de 2009.
En cuanto a la inmigración internacional, con base en los resultados de este ejercicio estadístico no se evidencian fluctuaciones drásticas en sus niveles, por el contrario desde el cuarto trimestre de 2009 se advierte una aparente estabilidad del indicador.
La reducción generalizada de las tasas advierte para todas las desagregaciones geográficas que se permiten. Por tamaño de localidad, se observa que el grado de urbanización es inversamente proporcional al grado de intensidad con el que ocurren cambios de residencia de México al extranjero y viceversa, ya que en las localidades rurales se observan las tasas de emigración e inmigración más altas y, en contraste, en las localidades más urbanizadas (15 mil habitantes y más) se reportan los niveles más bajos desde 2006.
La migración generalmente se considera como la respuesta a las diferencias entre los países de origen y destino (diferencias en recursos, oportunidades de empleo y seguridad, entre otros). Por lo tanto, las implicaciones socioeconómicas de los desplazamientos migratorios son notorias por diversas razones, entre ellas se encuentra el impacto inmediato que tienen en el mercado de trabajo, tanto en los países de origen como en los de destino, ya que en su mayoría el contingente se compone por población en edades productivas y predominantemente de sexo masculino.
La reciente desaceleración del fenómeno migratorio de nuestro país al extranjero ocurre en un escenario de crisis económica mundial profunda que inició en 2008; ante los niveles de desempleo más elevados observados en muchas naciones; y particularmente, con un previo incremento en la vigilancia de la frontera norte de nuestro país y el reciente endurecimiento de las políticas migratorias en los Estados Unidos de América, principal destino de los migrantes internacionales mexicanos.
Es posible notar que los patrones y los niveles de las tasas trimestrales presentan comportamientos distintos entre 2006-2007 y 2008-2009. En el primer bienio los niveles de la emigración son significativamente más elevados y es clara la estacionalidad de las series, tanto en las tasas de entrada como en las de salida de connacionales; mientras que para el segundo periodo se disipa dicha estacionalidad y se acentúa el descenso de la emigración.
La información que provee la encuesta también permite distinguir que no solamente se modificaron los volúmenes de población migrante, sino también su composición por edad. En el periodo 2006-2009 se incrementó casi 5 puntos porcentuales la proporción de personas de 40 años y más que salieron de México para vivir en el extranjero, cambio que se acompañó de un ligero descenso en la proporción de población emigrante de 15 a 39 años.
Para resumir este efecto resulta de utilidad la edad mediana, ya que se trata de una medida de tendencia central que divide la distribución por edades de una población determinada en dos grupos numéricamente iguales. La mitad de los casos quedan por debajo de la mediana y la otra mitad por encima, a diferencia de la edad media, esta medida se caracteriza por ser estable ante valores extremos. En el caso de los emigrantes, el indicador se incrementó casi tres años, pasó de 24.8 a 27.7 en el periodo 2006-2009.
La estructura por edad de la población que llegó a vivir al territorio nacional desde el extranjero también observó cambios. Por un lado, la proporción de inmigrantes menores de 15 años mostró un incremento importante con el máximo en 2008, donde significó poco menos de 16 por ciento del total de inmigrantes, en comparación con la proporción de 2006 (8.8 por ciento).
Por otra parte, el porcentaje de personas de 15 a 39 años de edad muestra una reducción notoria, acentuada en 2008, con una diferencia de 6 puntos respecto de su valor al inicio del periodo. En este caso, la edad mediana se mantiene alrededor de los 28 años, excepto en 2008 donde fue 26.5, el valor mínimo del cuatrienio.