Varios padres del colegio de Arteixo mostraron ayer su malestar por la manera en la que se está llevando el caso. Jorge Ríos, padre de una compañera de la niña del velo, quiso denunciar ayer las malas formas del director del CEIP de Arteixo, «que irrumpió abruptamente en la clase donde se encontraba la menor, y la expulsó del aula. Le dijo que no pertenecía a ese colegio y que se fuera de una vez. La profesora incluso pidió que le dejara entregarle unas fotografías, y él le dijo que las cogiera pero que se fuera».

Este padre consideró que esta actitud no se puede consentir, sobre todo cuando se trata de una niña de once años «que no tiene nadie que la pudiera defender». De hecho, dijo que no solo era reprobable el trato hacia esta alumna, sino que incluso «amenazó» a todos los alumnos, «que aquel que intentara ir contra él tenía las de perder», explicó ayer Jorge Ríos.

El asesor del padre de la niña y catedrático de Derecho Eclesiástico del Estado de la Universidad de A Coruña, Juan Ferreiro, explicó que «de la actitud del director del centro se observa una clara intención de humillar a la menor delante de sus compañeros». Y el alcalde, Carlos Calvelo, dijo que se trataba de un problema interno del colegio.