La prosperidad de Europa dependerá de la llegada de talento extranjero

El desempleo y las dificultades económicas que afrontan los países de la Unión Europea no han disminuido la necesidad que tiene el continente de trabajadores inmigrantes, que crecerá en los próximos años. Por ello, Europa prepara una serie de medidas para el fomento de la entrada legal de profesionales extranjeros con facilidades para la obtención de los permisos de residencia y, en ciertos casos, la eliminación de dicha autorización.

Contradiciendo el discurso que se escucha en muchos países europeos, especialmente en las campañas electorales, lo comisaria de Interior de la UE Cecilia Malmstrom ha anunciado que las medidas para atraer talento extranjero buscan sostener el sistema de bienestar europeo.

Por ello, se les ayudará a encontrar empleos adecuados a sus capacidades y se les facilitará el envío de dinero a sus familiares en los países de origen.

Aunque la tasa media de desempleo en la Unión ronda el 9,5% -lo que en cifras absolutas se traduce en 22,5 millones de parados-, el envejecimiento de la población europea hace prever que no habrá suficientes trabajadores que cubran puestos cualificados. Malmstrom lo dejó más claro al explicar que 'para asegurar su prosperidad, Europa debe convertirse en un destino más atractivo en la competencia global para captar talento'.

De hecho, los datos indican que el 62% del crecimiento de la población de la región durante el año pasado la generó la inmigración.

En cuanto a los sectores en los que la demanda de profesionales es más urgente, Malmstrom destacó que en los próximos dos o tres años se necesitarán cerca de dos millones de personas en el sector sanitario, principalmente médicos y enfermeras, así como ingenieros y especialistas en tecnologías de la información