Antonio Aguarón: ''No tienen asociaciones y no suelen participar en nuestras actividades''

El subdirector xeral de Retorno e Inmigración, Antonio Aguarón, explica que, actualmente, no existen asociaciones de inmigrantes chinos en la comunidad gallega -"al menos que hayan contactado con nosotros", puntualiza-. Indica también que en las actividades que su departamento organiza, y "en las que participa todo tipo de inmigración", tampoco "suele haber inmigrantes chinos".

Al respecto, el subdirector xeral insiste en que, al no existir este tipo de colectivos, su departamento no cuenta con los datos suficientes para disponer de un "perfil del inmigrante chino". "Desconocemos un poco cuál es su planteamiento, incluso a la hora de acceder al país", reconoce.

Como posible razón, Aguarón apunta a que "su cultura es mucho más independiente y no necesitan la unión que da ese movimiento asociativo". En cambio, destaca que la población china ''mantiene muchísimo sus tradiciones'', como la celebración del año nuevo propio, aún cuando viven fueran de su país de origen. En este sentido, matiza que este aspecto no se percibe mucho en Galicia, donde la inmigración china ''no es alta'', pero sí en las grandes ciudades españolas, como Madrid.

AUTOEMPLEO
También recuerda que estos inmigrantes se dedican, fundamentalmente, al "autoempleo", hasta el punto de "haber entrado a formar parte de la jerga de la gente". Todo ello a pesar de que en Galicia "todavía estamos asistiendo a la explosión de los comercios regentados por chinos". "La gente dice esto lo compro en el chino, pero no esto lo compro en el rumano o en el caboverdiano y seguro que hay algún caboverdiano que tiene un bazar", comenta el subdirector xeral.

Al respecto, Aguarón añade que la población china gallega está asentada, fundamentalmente, en las ciudades o, como mucho, en las poblaciones dormitorio limítrofes con estos grandes núcleos de población, ya que "es donde existe una mayor concentración de establecimientos que pueden ser regentados por ellos". "Poco sentido tendría que un chino se asentase en Chandrexa de Queixa si quiere abrir uno de estos comercio", reflexiona.

En esta misma línea, el subdirector xeral señala que "parece claro que son gente que viene con una idea muy clara de lo que van a hacer" una vez hayan llegado a tierras gallegas. "Desde el momento en que hay grandes cadenas de distribución de productos chinos, tienen muy fácil acceder en su país de origen a toda la información que necesitan", aduce. "Digamos que ya vienen por una vía un tanto organizada y montada de lo que piensan hacer aquí", sentencia Aguarón.