• Asegura que en ella tendrán cabida las inquietudes, deseos y aspiraciones de la Galicia universal “a la que queremos darle ánimo”.
• Incide en que esa Galicia universal no será fuerte con asociaciones que meramente sobreviven, sino con comunidades asentadas en instituciones que den respuestas a los problemas y retos de hoy.
• Destaca que la galleguidad que representan las comunidades gallegas tiene un importante peso económico, que se demuestra en las asociaciones empresariales gallegas que trabajan en Argentina, Uruguay, Brasil, Panamá, Costa Rica, Venezuela, Portugal, Andorra, País Vasco, Madrid y Cataluña.
• Resalta que Galicia es cuna de multinacionales y punto de destino de multinacionales y se refiere a Inditex, “un milagro con sello de galleguidad”, o al acuerdo firmado con la compañía mexicana Pemex para realizar diversas inversiones en Galicia, como ejemplos.
• El titular de la Xunta afirma que el anteproyecto de ley tiene como objetivo fundamental, también, actualizar y regular la participación de las nuevas entidades que surgieron en estos últimos 30 años, con especial atención a fomentar la participación de la juventud y de la mujer en el mundo de la galleguidad.

El presidente del Gobierno gallego, Alberto Núñez Feijóo, destacó, hoy, que el Anteproyecto de Ley de la Galleguidad refuerza la orientación económica de las entidades gallegas, conscientes de que tienen un papel en la internacionalización de la economía gallega, y fomenta los procesos de unión o fusión de las comunidades y entidades gallegas, “porque estamos convencidos de que a través de la cooperación sobrevivirán en el tiempo, serán más útiles para los gallegos y serán más útiles para sus propios socios”. Asimismo, destacó que el documento tiene un tercer objetivo: actualizar y regular la participación de las nuevas entidades que surgieron en estos últimos 30 años, con especial atención a fomentar la participación de la juventud y de la mujer en el mundo de la galleguidad.

Durante el acto de inauguración del X Consello de Comunidades Galegas, el titular de la Xunta aseguró que en ella tendrán cabida las inquietudes, deseos y aspiraciones de la Galicia universal “a la que queremos darle impulso”. “Esa Galicia universal no será fuerte con asociaciones que meramente sobreviven, sino con comunidades asentadas en instituciones que den respuestas a los problemas y retos de hoy. Tenemos en nuestras manos una herramienta de extraordinario valor en el mundo actual. Sepamos actualizarla y utilizarla”.

Feijóo aseveró que la galleguidad que representan las comunidades gallegas tiene un inmenso valor sentimental, un enorme caudal humano y un importante peso económico, que se demuestra en esas asociaciones empresariales gallegas que trabajan en Argentina, Uruguay, Brasil, Panamá, Costa Rica, Venezuela, Portugal, Andorra, País Vasco, Madrid y Cataluña.

Asimismo, subrayó que la Galicia universal no es cosa del pasado, “es cosa del futuro”, y afirmó que para que esa Galicia supraterritorial que está allí donde hay un gallego aproveche los nuevos tiempos, tiene que contemplar las nuevas fórmulas de asociacionismo, y afrontar el reto de la unidad. “Las redes sociales, las fórmulas de cooperación juvenil, las nuevas organizaciones solidarias, son fenómenos a los que la nueva galleguidad no puede estar ajena. No lo está, pero es necesaria una implicación incesante que mantenga el vínculo con las nuevas generaciones que quieren participar, con su estilo, en su proyecto de país”.

El responsable autonómico manifestó que esa galleguidad que puede estar en todas partes es hoy un inmenso tesoro que tenemos que aprovechar; “una inmensa ventaja que pocos pueblos poseen”. “No es pura retórica. Galicia es cuna de multinacionales y punto de destino de multinacionales”, aseveró, después de referirse a Inditex, “un milagro con sello de galleguidad”, y al acuerdo firmado con la compañía mexicana Pemex para realizar diversas inversiones en Galicia, “un acuerdo que demuestra que la cuarta petrolera del mundo confía en nosotros, pero no ignoro igualmente que el vínculo de México con los gallegos influye de manera decisiva”.

Feijóo concluyó recordando las palabras con las que Vicente Risco solía reprender a aquellos que decían que Galicia es pequeña: “«Galicia es un mundo», replicaba. Lo decía hace muchos años, pero esa afirmación sigue teniendo vigencia a estas alturas del siglo XXI”.