El aumento del paro entre los menores de 25 años, la falta de ayudas para sus proyectos de innovación o emprendimiento se vive en nuestro país, pero otros muchos países europeos no son ajenos a esta situación. Para abordar esa situación y evaluar pautas comunes con el fin de activar medidas que palíen esas y otras problemáticas que afectan a los jóvenes se desarrolla estos días en Lalín un encuentro en el que participan representantes de siete países.
Viviendo en Europa, construyendo Europa se denomina este proyecto con presencia de 63 jóvenes de Austria, Alemania, Bélgica, Francia, Holanda, Eslovaquia y España. Desde el pasado lunes se alojan en el albergue lalinense de Mouriscade, base de operaciones para un programa que concluirá el día 31. A través de dinámicas de grupo, reuniones y debates se evalúa de forma conjunta problemas que afectan a estos jóvenes al margen de su país de origen. Pero además se busca intercambiar experiencias que puedan ayudar a establecer pautas para favorecer una solución a cuestiones como el creciente paro juvenil, las dificultades para emprender e innovar, además de analizar su papel como ciudadanos europeos y sus derechos.
El Comité de Irmanamento de Lalín (Cirla) promueve este intercambio, el octavo desde su fundación en 1998. Un colectivo que promovió además la inclusión del municipio dezano en la federación de ciudades europeas Linden saúda Linden en el 2004.
El programa que concluirá el día 31, además de los debates y reuniones, también cuenta con una parte lúdica y formativa. Hoy está previsto que visiten en Pontevedra proyectos de buenas prácticas en iniciativas juveniles, así como Combarro y O Grove. Mañana será el evaluación final del encuentro y los espectáculos finales de despedida en Mouriscade.