Galicia vivirá un resurgir de los nacimientos dentro de cinco años

(10/12/2022)

Galicia vivirá un resurgir de los nacimientos dentro de cinco años

CEDIDA | EUROPAPRESS

 

Hasta el 2036 la inmigración seguirá mitigando la pérdida de población, se disparará la mortalidad y las áreas urbanas no dejarán de captar residentes, menos las de Vigo y Lugo

09 dic 2022 .

No todo está perdido en materia demográfica para Galicia. La comunidad seguirá bajando en volumen de población en los próximos tres lustros, habrá incluso más fallecimientos que ahora, pero el Instituto Galego de Estatística atisba una pequeña luz de esperanza que se encendería a corto plazo con un modesto repunte de la natalidad a partir del 2028. Las proyecciones de población que cada dos años elabora el organismo oficial, dibuja una curva descendente en el número de nacimientos pero que cambiaría de sentido dentro de cinco años. Se pasaría de los 14.436 niños llegados al mundo este año a 13.981 en el 2027, para volver a crecer a partir de ahí y de manera continuada hasta el final de la serie de la proyección dada conocer hoy por el IGE. En el 2036 nacerían, según los cálculos del instituto, 15.012 niños, contingente que superaría tanto el de los alumbramientos del año pasado como el esperado para el ejercicio que está a punto de terminar.

En la proyección diseñada por el IGE se advierte una pérdida de población en Galicia de un 1,3 % hasta el 2037, aunque será más intenso en las provincias de Lugo y Ourense, donde tendrán un 5 y un 3 % menos de residentes que ahora, respectivamente. La provincia de A Coruña cederá en el mismo período un 0,7 % y la de Pontevedra otro 0,3. Los polos de crecimiento se aglutinarán fundamentalmente alrededor de las urbes gallegas, aunque no en todos los casos, según el pronóstico estadístico. El área urbana de A Coruña se apunta como la de mayor crecimiento poblacional, siguiendo la estela de los últimos diez años, como acaba de certificar el censo de habitantes y viviendas elaborado por el INE. El núcleo urbano coruñés aumentaría en un 3,5 % su población, y le seguirían el de Ourense, con tres puntos de crecimiento, demostrando la capacidad de atracción de una provincia que se despuebla aceleradamente y en la que se espera que tenga menos residentes en el 2037 que los que viven en la actualidad en Vigo.

Para el área de Santiago se estima un aumento de la población del 1,7 %; del 1,2 en la zonas de Caldas-O Salnés; crecerá un 0,9 en el espacio formado por las comarcas Paradanta, O Baixo Miño y O Condado, y otro 0,8 alrededor de Pontevedra capital. En sentido contrario destaca la pérdida de población de las comarcas de A Fonsagrada, Os Ancares y Sarria (-11,5 %), el sur de Ourense (-9,2), o la Costa da Morte (-7,4), pero destacan también las bajadas que se apuntan para el área de la capital de Lugo (-4,2) y la de Vigo (-0,3).

La principal causa de la pérdida poblacional de la comunidad seguirá siendo la de una alta mortalidad, que incluso se espera siga creciendo, haciendo imposible un cambio de tendencia en el saldo vegetativo de Galicia, que es negativo desde 1988, al registrar más muertes que nacimientos. Hasta la conclusión del 2036, las proyecciones estiman que habrá 214.785 nacimientos y 504.575 fallecimientos, siendo negativo el resultado de ambos movimientos naturales de la población en todas las áreas territoriales de Galicia. 

La inmigración seguirá evitando que haya un descalabro demográfico en la comunidad, al estimarse que continuará siendo mayor el número de personas que llegan a instalarse en Galicia que las que se van, pero las 254.842 que se espera conformen un saldo positivo en dicha cuenta, no llegarán para cambiar a negro los números rojos del saldo vegetativo.