R. PRIETO | A CORUÑA La reforma del voto emigrante se tambalea. Al menos para que las decisiones que se acuerden en el seno de la subcomisión del Congreso que debate las modificaciones puedan aplicarse ya en las elecciones municipales del próximo año. Populares y socialistas volverán a reunirse hoy para debatir la reforma de la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (Loreg).

En el orden del día estaba la presentación de las propuestas por parte de PP y PSOE sobre la participación electoral de los españoles en el exterior. Por segunda semana consecutiva, populares y socialistas acordaron retirar de la agenda del día el tema que tanta polémica ha provocado en las filas socialistas, sobre todo en las comunidades autónomas con más peso de la emigración como Galicia. Asturias o Canarias.

La previsión es que las restricciones a la diáspora en los comicios no se debatan hasta el próximo mes de mayo. Este nuevo aplazamiento no permitiría que la reforma de la ley electoral entrase en vigor el próximo año, lo que supondría que el veto a la emigración en las municipales no se aplicaría hasta la cita electoral de 2015.

Para el BNG, este retraso en la presentación de propuestas "tensará" aún más los plazos en la negociación de la reforma. "El margen es muy justo para que sus trabajos concluyan en junio con un acuerdo sobre el voto emigrante, lo que supondría retrasar la entrada en vigor de las modificaciones pactadas", aseguran desde el Bloque.

Las presiones internas de los socialistas ante las restricciones que plantean los dos partidos mayoritarios forzaron un cambio de postura en el PSOE. Su pretensión sigue siendo la de vetar a la emigración en las municipales, pero quiere que sean las comunidades las que decidan sobre la participación de sus emigrantes en las autonómicas. Hasta mayo, no se conocerá la propuesta definitiva.